07 Dic Editorial: Planificación de la maternidad y preservación

Como mujeres, todas pensamos o hemos pensado alguna vez en la maternidad. Nos imaginamos cuál sería el momento idóneo en nuestra vida para ser madre; o bien decidimos que este proyecto no está hecho para nosotras. Pero, sea cual sea nuestra idea inicial, la vida muchas veces nos lleva por caminos que no habríamos sospechado.

Por este motivo, es importante ser consciente de la importancia del hecho reproductivo y disponer de la información necesaria para prepararnos y buscar el encaje de éste en nuestra existencia.

En la actualidad hay un desajuste entre la “edad social” y la “edad biológica” de las mujeres; mientras a los cuarenta nos sentimos jóvenes y empoderadas, la plenitud reproductiva se halla entorno a los veinte años. Sabemos que, como sociedad, deberíamos propiciar que las mujeres (con o sin pareja) pudieran recuperar la sincronía entre biología y desarrollo personal, profesional, económico, etc., aunque, mientras no ocurra, tenemos opciones que nos pueden ayudar a conseguir nuestro deseo.
La preservación de la fertilidad mediante la vitrificación de óvulos es una de ellas. Esta técnica nos permite generar una reserva por si más adelante tenemos dificultades para conseguir un embarazo evolutivo. Pero para que esto funcione, debemos tener presente a qué edad vitrificamos nuestros óvulos. Idealmente deberíamos hacerlo antes de los 35 años, cuando es esperable tener una buena reserva ovárica y una baja tasa de alteraciones cromosómicas en los óvulos. Estos dos factores están estrechamente relacionados con el éxito reproductivo de los tratamientos de fecundación in vitro y desafortunadamente con la edad se ven mermados. Entre los 36 y 38 años podemos obtener resultados aceptables y no es que no podamos vitrificar óvulos a edades más avanzadas, pero deberemos entonces ser conscientes de las limitaciones asociadas.

Este es un ejemplo de como la ciencia nos puede ayudar en nuestro proyecto reproductivo, pero la clave es plantearnos qué importancia tiene o puede llegar a tener la maternidad en nuestra vida. A partir de ahí, tener la información adecuada nos puede ayudar a tomar decisiones acertadas.