01 Jun ¿Es la edad del hombre un factor determinante en la búsqueda del embarazo?

Durante el mes de mayo hemos intentado concienciar e informar sobre los diversos aspectos que pueden condicionar la búsqueda del embarazo, así como de la importancia de conocer las diferentes opciones reproductivas y de una correcta planificación de la maternidad. Edad, hábitos saludables, preservación de la fertilidad para aquellas mujeres que, pese a tener claro que quieren ser madres en el futuro, aún no han encontrado el momento adecuado, etc.

Pero, ¿Qué sucede en el caso de los hombres? Es cierto que muchas veces centramos el tema en las mujeres, en parte por la urgente necesidad de reforzar que la edad es un factor totalmente determinante para lograr el embarazo, pero esto no quiere decir que no sea un factor que también debamos tener muy en cuenta en el caso de los hombres.

¿Influye la edad del hombre en los embarazos naturales?

A diferencia de las mujeres, es cierto que la edad en la que el hombre sigue siendo fértil se prolonga mucho más. Sin embargo, con los años las probabilidades de embarazo también se empiezan a reducir y puede aumentar el riesgo de que exista alguna anomalía en el material genético de los espermatozoides.

En el caso de los hombres, la producción de esperma se sigue produciendo en edades avanzadas, a no ser que exista algún problema derivado de una enfermedad, una cirugía o se produzca algún daño específico. Sin embargo, según avanza la edad, la calidad de este esperma también empezará a descender. Se estima que este deterioro comienza alrededor de los 45 años.

¿Qué riesgos puede implicar la edad del hombre en relación con el embarazo?

Como hemos visto, la edad del hombre no muestra una relación tan directa con su fertilidad, sino que repercute en la calidad del esperma, lo que implica una serie de riesgos tanto en la búsqueda del embarazo como para el desarrollo de este, así como el mayor tiempo que puede necesitar una pareja para concebir.

Este descenso en la calidad está relacionado con el aumento de las posibilidades de encontrar algún tipo de anomalía en el propio ADN del esperma, además de incrementarse el riesgo de sufrir abortos espontáneos o que el bebé nazca con algún defecto congénito.

La importancia del estudio genético

Cuando los hombres superan los 45 años, aproximadamente, y la pareja no logra el embarazo, es recomendable realizar un estudio para evaluar el material genético presente en los espermatozoides y analizar si se ha producido una fragmentación en su ADN.

En este caso, cuando un espermatozoide que presenta alguna anomalía en su ADN fecunda el óvulo, encontramos embriones de peor calidad y por lo tanto puede dar lugar a que no se desarrollen o aumente el riesgo de que deriven en fallos de implantación o abortos.

Los resultados de esta prueba nos indicarán, además, si es necesario recurrir a un tratamiento de reproducción asistida, generalmente la Fecundación in Vitro (FIV) para realizar la selección de los espermatozoides más capacitados, y así lograr el embarazo.

¿Afecta la edad del hombre en los tratamientos de reproducción asistida?

Una de las ventajas de los tratamientos de reproducción asistida, como hemos dicho en el caso de la Fecundación in Vitro, es la selección de los mejores espermatozoides para lograr fecundar el óvulo.

Así, aunque con la edad la producción de esperma sea de menor calidad, técnicas como la ICSI (Inyección Intracitoplasmática de Espermatozoides), en la que el espermatozoide seleccionado se introduce en el interior del óvulo a través de una fina aguja, permiten aumentar el número de positivos y el nacimiento de bebés sanos.

Por lo tanto, a pesar de que la edad está relacionada con la calidad, cuando una pareja recurre a un tratamiento de reproducción asistida, la tecnología existente actualmente puede contribuir a paliar estos efectos en el caso del hombre.

Preservación de la fertilidad masculina

A pesar de que es una opción que siempre proponemos cuando las mujeres empiezan a cumplir años y no encuentran el mejor momento para hacer frente a la maternidad, los hombres también tienen la posibilidad de preservar su fertilidad mediante la congelación de una muestra de semen y utilizarla cuando consideren que ha llegado el momento.

Aunque, por lo general, la preservación de la fertilidad masculina se relaciona más con una cuestión médica, por ejemplo, si el paciente debe comenzar un tratamiento de quimio o radioterapia que pueda comprometer su fertilidad, la preservación por motivos sociales también es posible en las clínicas de reproducción asistida.